Descripción
Ningún hombre, lo repito, ha contado con mayor magia las excepciones dela vida humana, y de la naturaleza, los ardores de curiosidad de la convalecencia, los finales de stación cargados de esplendores enervantes, los tiempos cálidos, húmedos y brumosos, en que el viento del sur ablanda y afloja los nervios como las cuerdas de un instrumento, en que los ojos se llenan de lágrimas que no provienen del corazón; la alucinación dejando lo primero sitio a la duda, y muy pronto convencida y razonadora como un libro;lo absurdo instalándose en la inteligencia y rigiéndole como una lógica espantosa, la histeria usurpando el sitio de la voluntad, la contradicción asentada entre los nervios y el espíritu, y el hombre desacorde hasta el puntode expresar el dolor con la risa. El analiza lo que hay de más fugaz, sopesa lo insoportable y describe en una forma minuciosa y científica, cuyos efectos son terribles, toda esa parte imaginaria que flota en torno al hombre nervioso y le hace acabar mal. Charles Baudelaire