Descripción
Ocho hombres condenados por ser anarquistas, y condenados siete de ellos a muerte en la libre y feliz república federal norteamericana: he ahí el resultado final de una comedia infame, en la que no hubo procedimiento indigno a que no se apelase ni falsedad ni perjurio que no se admitiese. He ahí las ventajas que los trabajadores pueden esperar de las repúblicas. He ahí la demostración evidente de que la lucha de clases se sobrepone a la lucha política.